Hoy en la clase de la tarde por la ventana se veía el cielo pintado de colores, unos minutos antes alguien me dijo que le encantaban los días así, la frase exacta fue "los días así me ponen de buenas" (creo), mi respuesta inmediata fue, "a mi no" los días nublados y lluviosos los tomó siempre como una ofensa personal. Curiosamente, unos minutos después, al mirar el cielo, descubrí que me estaba poniendo de buenas y suspiré.
En el camino hacia acá, venía pensando en que algo bonito sería hacer una lista de deseos. Hace poco se me calleron dos pestañas y pedí dos deseos, uno no se me cumplio y el otro puede ser que se cumpla pero no creo. La verdad es que los deseos que no dependen de uno mismo para realizarse pues...apestan. Así que ahora haré una lista de pequeños deseos atribuibles a mi albedrío.
Hoy se me ocurre uno, con el tiempo la lista irá aumentando:
1. Quiero escuchar a Mates of State en una tarde de lluvia. Sentarme en la terraza de mi casa en Cocoyoc, durante una de esas tormentas torrenciales que solo he visto caer ahí y escucharlos.
2. Quiero salir de mi casa en una tarde de lluvia, de esas lluvias que caen a cubetadas y mojarme y mojarme hasta que me duela la piel.
Mis ojos cansados de mirar hacia adentro buscan una salida en códigos indestructibles pero a la vez tan etéreos.
Tengo miedo
la tarde es gris
y la tristeza del cielo se abre
como una boca de muerto