Javier Marías me muestra un mundo complejo, muy bien descrito. Me gustan sus personajes, son de los personajes mas completos que recuerdo haya leído. Sus personajes tienen un montón de manías, recuerdos, sensaciones, defectos, su inconciente puede verse, a través de sus descripciones, de sus diálogos. Explora dentro de la mente humana, la desdobla, juega con ella, la crea en si misma, y la vuelve a doblar, para crear así un ente nuevo, intensamente vivo, real. Javier MArías juega con mi mente, hace que a veces me identifique con sus personajes y a veces me desconcierte por lo que piensan, me gusta pensar que yo también juego con su mente un poco, tratando de descubrir rasgos personales entretejidos en sus personajes, tratando de descubrir sus propias manías, recuerdos, defectos...
Mis ojos cansados de mirar hacia adentro buscan una salida en códigos indestructibles pero a la vez tan etéreos.
Tengo miedo
la tarde es gris
y la tristeza del cielo se abre
como una boca de muerto
